Esta sencilla receta es muy aconsejable llevarla a cabo dos veces por año para que nuestra casa esté siempre limpia de malos espíritus y de energías negativas en general. Para ello:
Coge el cubo con el que sueles fregar tu hogar y echa un chorro de vinagre, el zumo de un limón y un chorro de amoníaco. A continuación deberemos fregar la casa de dentro hacia fuera (hacia la puerta de la calle). Cuando hayamos terminado tiraremos el agua sucia por el retrete. Quemaremos entonces unas hojas de laurel por las habitaciones de la casa haciendo la señal de la cruz al tiempo que pedimos protección para nuestro hogar y para los que habitamos en él. Terminaremos dando las gracias con un Padre Nuestro.
Coge el cubo con el que sueles fregar tu hogar y echa un chorro de vinagre, el zumo de un limón y un chorro de amoníaco. A continuación deberemos fregar la casa de dentro hacia fuera (hacia la puerta de la calle). Cuando hayamos terminado tiraremos el agua sucia por el retrete. Quemaremos entonces unas hojas de laurel por las habitaciones de la casa haciendo la señal de la cruz al tiempo que pedimos protección para nuestro hogar y para los que habitamos en él. Terminaremos dando las gracias con un Padre Nuestro.
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