Duerme una noche con tres velas de color morado bajo la almohada. Al despertarte, enciéndelas y colócalas sobre un plato blanco.
Llena la mitad de un vaso de agua y añade un poco de azúcar moreno. Coloca este vaso a la izquierda del plato con las velas. A la derecha del plato enciende una varilla de incienso de sándalo.
Pide a tu ángel de la guarda que le dé fuerzas a esa persona.
Cuando se consuman las velas, quema el papel y pon el vaso sobre la mesilla de noche durante tres noches.
No hay comentarios:
Publicar un comentario